Este escultor italiano del
manierismo fue un especialista en la técnica del bronce y trabajó como
retratista para los Carlos I y Felipe II.
A Pompeo Leoni se debe el conjunto
escultórico del retablo mayor y los mausoleos del monasterio de El Escorial.
|
Grupo escultórico de Felipe II y su familia en El Escorial
|
Escultor renacentista
Hijo del también escultor Leone
Leoni, Pompeo nació en Milán aproximadamente en 1533.
Durante
años aprende de su padre los secretos de la escultura hasta que el 28 de
septiembre de 1556 marchan los dos a España para trabajar al servicio de Carlos
V.
Cuando
desembarcó en España con la serie de retratos imperiales, la reina regente
Juana de Austria le asignó un salario de 30 ducados al mes. Entonces, el
escultor se dedicó a terminar las piezas que traía.
|
Emperatriz Isabel |
Pero un
duro contratiempo interrumpiría su trabajo. En 1558, en un proceso de la
Inquisición, se le acusó de luteranismo, por lo que tuvo que pasar un tiempo
recluido en un monasterio. Al quedar en libertad continuó con los trabajos, que
no dio por acabados hasta 1564.
Además
de colaborar con su padre en todos sus trabajos, Pompeo Leoni creó un taller en
Madrid y realizó algunas otras obras individualmente. En 1570, ya confirmado
como escultor de corte, llevó a cabo las esculturas que decoraron la celebración
de la boda del rey con su cuarta esposa, Ana de Austria. También se encargó del
pedestal para la urna que contenía las reliquias de san Eugenio, en la catedral
de Toledo, y la estatua orante Juana de Austria, hermana de Felipe II, en las
Descalzas Reales de Madrid (1574).
Pompeo fue el más digno seguidor de su padre y continuo su
obra, especialmente trabajando en España para la cortes de Carlos V y su hijo
Felipe II.
|
Carlos V dominando el Furor
|
Pero, sin duda, su trabajo más importante, junto a su padre,
fue la realización de los retablos de El Escorial. Allí esculpió 27 esculturas
para el Retablo Mayor y los monumentos funerarios para la Capilla Mayor de
Carlos V y Felipe II.
Su obra
Partiendo de la figura de Miguel Angel, Leone y Pompeo Leoni encarnaron la figura del escultor de corte de una manera excepcional, definiendo una imagen de la realeza caracterizada por la frialdad y solemnidad.
Los Leoni, constituyeron durante la segunda mitad del siglo XVI y los primeros años del XVII, el más importante foco escultórico de toda Europa.
El estilo
de sus esculturas muestran la tendencia del manierismo lombardo italiano, y,
aunque según los expertos no todas sus creaciones pueden clasificarse como
obras maestras, en todas ellas su maestría de la técnica es absoluta. Sus
creaciones tuvieron especial incidencia en la escultura castellana.
Pero a Pompeo Leoni se debe el
conjunto escultórico más importante llevado a cabo en España en el siglo XVI:
el retablo mayor y los mausoleos del monasterio de El Escorial con esculturas de bronce. También
participó en la realización del Mausoleo imperial, donde colaboraron Miguel
Leoni, Juan de Arfe y Baltasar Mariano. Esta obra está compuesta de dos grupos,
uno encabezado por Carlos V y otro por Felipe II.
Durante once años (1579-1590)
Pompeo Leoni y los demás escultores, trabajaron en las quince figuras de bronce
que integran el grupo escultórico de El Escorial. Pompeo Leoni esculpió en su
totalidad los enterramientos reales situados a ambos lados del presbiterio de
la basílica.
Concebidos como grupos orantes, en
el lado del evangelio aparece Carlos V con su esposa la emperatriz Isabel y su
hija doña María, acompañadas por las hermanas del emperador, doña Leonor y doña
María. En el lado de la epístola se encuentra el de Felipe II, que aparece junto
a sus cuatro esposas y el príncipe don Carlos.
Emplazados en un suntuoso marco de arquitecturas clasicistas
de mármoles de colores, en contraste con la austeridad monocroma del resto del
templo escurialense, los grupos orantes Carlos
V y Felipe II dan un nuevo sentido a la imagen de los soberanos en
contacto con la Divinidad y la Muerte, configurando mediante unos recursos
clasicistas y unos caracteres máximos de distanciamiento y frialdad una visión
majestuosa y solemne del tema de la muerte.
Pompeo Leoni tuvo gran influencia en la escultura española de
la época, fue maestro de su hijo Miguel Ángel y de otros escultores y orfebres
como Juan de Arfe, Millán Vimercado, Baltasar Mariano, Antón de Morales y
Martín Pardo, los cuales colaboraron en los panteones imperial y real del
Monasterio de El Escorial.
Otros
monumentos fúnebres creados por Pomeo Leoni fueron: el
Busto de Carlos V (en colaboración con su padre); El emperador Carlos V y el
Furor (Museo del Prado); la estatua del sepulcro del inquisidor y arzobispo de
Sevilla Fernando de Valdés
realizado entre 1576 y 1582 en alabastro en la Colegiata de
Santa María la Mayor de Salas (Asturias); la del cardenal Diego de Espinosa, en Martín Muñoz de las
Posadas (Segovia); también las estatuas funerarias de Francisco Gómez de
Sandoval y Rojas y de su esposa, Catalina de la Cerda, duques de Lerma, en el
convento de San Pablo de Valladolid, así como la del cardenal de Sevilla,
Cristóbal Rojas, en la colegiata de Lerma (Burgos); Estatua orante del caballero Antonio de Sotelo y Cisneros
(Iglesia de San Andrés, en Zamora); busto de Felipe II (Museo Metropolitanode
Nueva York); Lauda de Pedro Dávila y Zúñiga y de María de Córdoba (Museo
Arqueológico Nacional);
Cristo de
las Mercedes (Valladolid), paso que se puede ver en la Semana Santa
vallisoletana; la estatua de la emperatriz Isabel, en mármol de Carrara; la de
María de Hungría, una en mármol y otra en bronce; la del príncipe Carlos de
Austria, en plomo; la de Francisco Fernández de Liébana; y varias alabastro,
jaspe, mármol y bronce de Felipe II.
Además,
realizó algunas medallas, como la del primogénito de Felipe II, el príncipe don
Carlos, y la de su preceptor Honorato Juan.
La obra de Pompeo Leoni ya
anunciaba la llegada del Barroco.
*****
CONTENIDO RELACIONADO