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EL NÚMERO PI: UN VIAJE A TRAVÉS DE LA ETERNIDAD MATEMÁTICA

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 El número π (pi) es uno de los conceptos matemáticos más enigmáticos y fascinantes que existen. Este número irracional ha cautivado a matemáticos, científicos y filósofos durante milenios, ya que representa no solo una constante matemática fundamental, sino también un símbolo de los misterios del universo y la naturaleza misma de las matemáticas.  ¿Qué es el número Pi? Pi es la relación entre la circunferencia de un círculo y su diámetro. Esto significa que, sin importar el tamaño del círculo, la longitud de la circunferencia siempre es aproximadamente 3,14159 veces el diámetro. Esta relación se simboliza con la letra griega π y se conoce desde la antigüedad, aunque su precisión y comprensión han avanzado a lo largo de los siglos. El número Pi es un número irracional , lo que significa que no puede expresarse exactamente como una fracción simple. Además, su expansión decimal es infinita y no periódica , es decir, sus dígitos no siguen ningún patrón repetitivo, lo que añade una capa d

DORA CARRINGTON, UNA PINTORA SIN CONVENCIONALISMOS

Llevó siempre una vida bohemia y basada en el amor libre y sin estereotipos, incluemdo ocasionales relaciones con otras mujeres.

Aunque tuvo muchos admiradores e incluso estuvo casada, ella siempre mostró un amor incondicional por el escritor homosexual Lytton Strachey.


Dora y el Círculo de Bloomsbury

Dora de Houghton Carrington nació un 29 de marzo de 1893 en Hereford, Inglaterra, donde asistió a una escuela femenina que promovía el arte.

Como desde muy temprana edad Dora mostraba predisposición a la pintura, sus padres le pagaron clases particulares de dibujo. Posteriormente, ganó una beca para la estudiar en la Slade Sxholl or Art de Londres.



Dora nunca fue miembro del grupo de Bloomsbury, pero siempre se la vincula a este por su relación con el escritor Lytton Strachey.

Se denomina Círculo o grupo de Bloomsbury (nombre que proviene del barrio de Londres donde se reunían) a un conjunto de intelectuales británicos que durante el primer tercio del siglo XX destacaron en el terreno literario, artístico o social.



Comenzaron a reunirse en torno a 1907 en casa de la escritora Virginia Stephen (después Virginia Woolf) y de su hermana Vanesa. La mayoría de los miembros de este grupo, además, formaban parte de la sociedad secreta denominada los “apóstoles de Cambridge” y muchos de ellos publicaron en la editorial que crearon Virginia y su marido Leonard Woolf.


El grupo obtuvo una gran relevancia en los medios a consecuencia de una broma que llevaron a cabo en 1910 cuando algunos miembros del círculo se hicieron pasar por representantes de la realeza abisinia para ser recibidos en el acorazado HMS Dreadmought con honores de estado. La broma tuvo éxito y puso en ridículo a la mismísima Royal Navy.
Aunque el grupo era heterogéneo, tenía varios puntos en común: despreciaban la religión, la moral victoriana, y gustaban del realismo. Por otra parte, todos se consideraban miembros de una élite intelectual ilustrada, de ideología liberal y humanista (la mayoría se había educado en prestigiosos colegios de Londres). Propugnaron la independencia de criterio y el individualismo esencial.
Integraron el grupo la mencionada escritora Virginia Wolf y su esposo, la hermana de la escritora,  que a su vez era pintora, los filósofos Bertrand Russell y Ludwig Wittgenstein, los críticos de arte Roger Fry y Clive Bell, el economista John Maynard Keynes, el sinóloo Arthur Waley, los escritores Gerald Brenan, Edward Morgan Foster, Catherine Mansfield y Lytton Strachey, el crítico Desmond MacCarthy y el pintor Duncan Grant.


Dora y Lytton Strachey

Dora Carrington fue una mujer atractiva y enamoradiza, pero de la que también era fácil enamorarse debido a su gran sensibilidad y corazón, según sus biógrafos.

Además, era una mujer rompedora en sus tiempos, no sólo puso de moda, por ejemplo, el corte de pelo à la “garçon”, sino que vivió el amor sin convencionalismos.

Dora parecía poseer un encanto personal mágico que atraía a muchos escritores de entonces de tal forma que muchos de ellos la incluyeran en sus obras: D.H. Lawrence, en su obra Women in Love (como Minette Darrington); Wyndham Lewis, en The Apes of God (como Betty Blythe); Rosamund Lehmann, en The Weather in the Streets (como Anna Corey); y Aldous Huxley, en Chrome Yellow (como Mary Bracegirdle).

A Dora, en fin, la cortejaron muchos hombres de su entorno. Dos de sus romances documentados fueron con Mark Getler, un conocido pintor inglés de la época, y con el escritor Gerard Brenan.

Llegó a casarse con uno de ellos, Ralph Patrdge, sin embargo, ella de quien realmente se enamoró profundamente, y con quien vivió la mayor parte de su vida, fue del escritor homosexual Lytton Strachey.


La atracción fue mutua: ambos se sintieron fascinados por el otro. Brotó la admiración, el respeto y un amor complejo, que fueron materializando en muy distintas formas a lo largo de los años.

Desde el día en que lo conoció, la vida sentimental y la obra de la pintora estuvo marcada por un punto y aparte.

Dora se enamoró perdidamente de Strachey, pero, a pesar de haber sido amantes, la homosexualidad de éste le impidió corresponderle como ella hubiera deseado.

Su relación con Lytton la vinculó indirectamente al grupo Bloomsbury, que reivindicaba el sexo y el amor libre (lo común y habitual eran las relaciones homosexuales y bisexuales), lo que casaba de maravilla con la vida bohemia de Dora y con su defensa de las relaciones sentimentales abiertas.

En este marco se desenvolvió siempre con Strachey. Y bajo estos códigos le fue posible mantener una especie de matrimonio a tres, tan típico en el ambiente en que ambos se movían. Mientras vivía con Lytton, conoció a Ralph Patridge. Ambos se enamoraron de él. Dora y Ralph contrajeron matrimonio.

Pero Dora no se sentía satisfecha en el plano sentimental y no se resistió a los brazos de mujeres como Henrietta Bingham y Julia Strachey. A la primera, hija de un embajador americano, la conoció en 1923, cuando Dora contaba con 30 años. La relación podría verse también como un ménage à trois, ya que Henrietta había sido anteriormente amante de Strachey. A Julia Strachey, novelista y sobrina de Lytton, la conoció en 1925.

Dora Carringtton
La amistad de Dora y Lytton fue peculiar e incondicional y estuvo siempre por encima de cualquier circunstancia. Ambos compartieron una relación arriesgada y revolucionaria para la época; pero tremendamente sincera y humana. A pesar de haber intentado en varias ocasiones separarse de Lytton y dejar de empeñarse en un amor imposible, a pesar de haber probado a poner tierra de por medio, Dora nunca consiguió desengancharse de él, ni apagar esa llama. Sólo calmarla a ratos. Strachey, por su parte, vivió siempre en la pena de no poder corresponderla, cargando a menudo con un sentimiento inevitable de culpa.

En 1928, Dora mantuvo relaciones con un amigo de Ralph, Bernard Penrose, de quien se quedó embarazada. La pintora decidió abortar. Se vio sola, sin apoyos; pero con la certeza de no querer traer una criatura al mundo. Sólo Lytton Strachey la apoyó.

En 1931, Lytton cayó enfermo, padecía cáncer. Dora, desesperada, llevó a cabo un primer intento de suicidio, encerrada en el garaje de su casa con el coche en marcha e inhalando los gases. Ralph llegó a tiempo de evitar la tragedia. Pero dos meses después de perder a Lytton, en 1932, Dora no encontraba aliciente que la empujara hacia adelante. Fue entonces cuando se disparó poniendo fin a su dolorosa existencia sin Strachey,

La vida de Carrington y Strachey fue llevada al cine en 1995 en la película “Carringtton” con Emma Thompson en el papel protagonista.

 Estilo

A Dora Carrington se la conoce más por su vida desgraciada y compleja que por su obra, pero fue una experimentada retratista y paisajista, y también trabajó en artes aplicadas y decorativas, pintando sobre cualquier superficie que tuviera cerca, como letreros, tejas o muebles..

En vida no fue muy conocida como pintora, ya que raramente firmaba sus obras y apenas expuso, pero desde 1970 creció el interés por su obra, que comenzó a obtener críticas y valoraciones positivas.


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