WAGNER: EL REVOLUCIONARIO Y CONTROVERTIDO GENIO ALEMÁN DE LA ÓPERA

Wagner fue un compositor, director de orquesta, escritor y teórico musical alemán, que vivió entre 1813 y 1883, y que es considerado uno de los genios y de los innovadores de la música y de la ópera. 

Wagner creó un estilo musical único y revolucionario, que se basaba en la integración de la música, la poesía, el drama y las artes visuales, y que se expresaba en sus obras maestras, conocidas como dramas musicales, que abordaban temas mitológicos, históricos, filosóficos y sociales. 

Wagner

Primeros años y formación

Wagner nació el 22 de mayo de 1813, en Leipzig, una ciudad de Sajonia, situada en el este de Alemania. Era hijo de una familia de clase media, de origen judío por parte de su abuelo paterno, y de tradición artística y literaria por parte de su madre. 

Su padre murió cuando él tenía seis meses, y su madre se casó con Ludwig Geyer, un actor, pintor y escritor, que se convirtió en su padrastro y en su primer maestro. Wagner recibió una educación musical y humanística, y mostró desde niño un gran talento y una gran pasión por la música y por el teatro. Aprendió a tocar el piano, el violín y la flauta, y compuso sus primeras obras musicales. 

Estudió en el Thomasschule, un prestigioso colegio de Leipzig, donde se formó en el idioma griego y en la literatura clásica. También estudió en la Universidad de Leipzig, donde se matriculó en la facultad de filosofía, pero no terminó sus estudios.

Sin embargo, Wagner se dedicó profesionalmente a la música y a la ópera, que se convirtieron en su vocación y en su pasión. Wagner trabajó como compositor, director de orquesta, crítico musical, organizador de festivales y de espectáculos, y fundador de teatros y de escuelas.

La ópera su pasión

 Wagner creó un estilo musical único y revolucionario, que se basaba en la integración de la música, la poesía, el drama y las artes visuales, y que se expresaba en sus obras maestras, conocidas como dramas musicales, que abordaban temas mitológicos, históricos, filosóficos y sociales. 

Su casa natal

Wagner se inspiró en las fuentes y las tradiciones de la cultura alemana y europea, como la mitología nórdica, la leyenda del Santo Grial, la historia medieval y moderna, la filosofía idealista y romántica, la poesía lírica y épica, etc. Wagner se caracterizó por los siguientes aspectos:

• El leitmotiv: Fue el recurso musical que consistía en asociar un tema o una melodía a un personaje, a un objeto, a una idea o a una emoción, y que se repetía y se variaba a lo largo de la obra, creando una unidad y una coherencia musical y dramática. El leitmotiv servía para identificar y para caracterizar los elementos de la obra, para anticipar y para recordar los acontecimientos, para expresar y para sugerir los sentimientos, para simbolizar y para contrastar los conceptos, etc.

• El cromatismo: Fue el recurso musical que consistía en usar las notas que no pertenecían a la escala o al tono de la obra, y que creaban una sensación de tensión y de inestabilidad musical y dramática. El cromatismo servía para romper y para enriquecer la armonía tradicional, para crear y para resolver las disonancias, para modular y para cambiar de tonalidad, para reflejar y para intensificar las pasiones, para evocar y para ambientar las atmósferas, etc.
• El gesamtkunstwerk: Fue el concepto artístico que consistía en la fusión y la síntesis de todas las artes, como la música, la poesía, el drama y las artes visuales, y que pretendía crear una obra de arte total, que abarcara y que satisfaciera todas las facultades y todas las necesidades del ser humano. El gesamtkunstwerk servía para superar y para sublimar la separación y la especialización de las artes, para crear y para comunicar un mensaje universal y profundo, para estimular y para armonizar los sentidos, el intelecto y el espíritu, para educar y para elevar al público, etc.

Wagner y Cosima, su segunda esposa

Las etapas de sus obras musicales

Wagner compuso y estrenó varias obras musicales, que se pueden clasificar en tres etapas, según su evolución y su madurez artística:

• La primera etapa: Fue la etapa de aprendizaje y de influencia de Wagner, que abarcó desde 1833 hasta 1842, y que se caracterizó por la imitación y la adaptación de los modelos y los estilos de la música y de la ópera europea, especialmente de la ópera italiana y francesa. En esta etapa, Wagner compuso y estrenó obras como: Las hadas (1833), La prohibición de amar (1836), Rienzi (1842), etc.

• La segunda etapa: Fue la etapa de transición y de experimentación de Wagner, que abarcó desde 1843 hasta 1864, y que se caracterizó por la búsqueda y la creación de un estilo musical propio y original, que se basaba en la integración de la música y el drama, y que se inspiraba en las fuentes y las tradiciones de la cultura alemana. En esta etapa, Wagner compuso y estrenó obras como: El holandés errante (1843), Tannhäuser (1845), Lohengrin (1850), Tristán e Isolda (1865), etc.
• La tercera etapa: Fue la etapa de culminación y de consolidación de Wagner, que abarcó desde 1865 hasta 1883, y que se caracterizó por la realización y la difusión de su obra maestra, el Anillo de los nibelungos, que era un ciclo de cuatro dramas musicales, que se basaban en la mitología nórdica, y que se consideraban la expresión máxima del gesamtkunstwerk. En esta etapa, Wagner compuso y estrenó obras como: El oro del Rin (1869), La valquiria (1870), Sigfrido (1876), El ocaso de los dioses (1876), Parsifal (1882), etc.

El teatro de Wagner

Vida intensa y agitada

Wagner vivió una vida intensa y agitada, que se vio marcada por su personalidad y por su época. Wagner fue un hombre de carácter fuerte, ambicioso, orgulloso, apasionado, contradictorio y polémico, que se involucró y se comprometió con los acontecimientos y los movimientos de su tiempo, como la revolución, el nacionalismo, el antisemitismo, etc. 

Wagner tuvo una vida amorosa y familiar complicada y turbulenta, que se vio afectada por sus relaciones sentimentales, como con Minna Planer, su primera esposa, con Mathilde Wesendonck, su amante, con Cosima von Bülow, su segunda esposa e hija de Franz Liszt, etc.

Wagner tuvo una vida profesional y artística difícil y exitosa, que se vio favorecida por su talento y por su trabajo, pero también por el apoyo y el mecenazgo de personas influyentes, como Ludwig II de Baviera, el rey loco, que le financió y le protegió, etc.

Tumba de Wagner en su villa

Wagner murió el 13 de febrero de 1883, en Venecia, una ciudad de Italia, donde se había trasladado por motivos de salud. Su cuerpo fue trasladado a Bayreuth, una ciudad de Baviera, situada en el sur de Alemania, donde se encontraba su residencia y su teatro, el Festspielhaus, que él mismo había diseñado y construido para representar sus obras. Su tumba se encuentra en el jardín de su casa, donde se dice que se conservan algunos de sus restos y de sus objetos personales.

Wagner, en fin, influyó y marcó la historia y la cultura de Alemania y del mundo, y fue admirado, criticado y controvertido por su vida, su obra y su pensamiento.