SANTO GRIAL: MISTERIOS, LEYENDAS, DESTINOS Y SIGNIFICADOS

El Santo Grial es uno de los objetos más misteriosos y fascinantes de la historia y de la leyenda. Se trata de la copa o el plato que se utilizó en la Última Cena de Jesucristo, y que según algunas tradiciones, también recogió su sangre en la cruz. 

El Santo Grial ha sido objeto de búsqueda, veneración y controversia a lo largo de los siglos, y ha inspirado numerosas obras de arte, literatura y cine. 

Santo Grial de Valencia

¿Qué es el Santo Grial?

El Santo Grial es un término que proviene del francés antiguo “san graal” o “san greal”, que significa “santo plato” o “santo vaso”. El origen de este término se remonta al siglo XII, cuando aparecieron los primeros relatos literarios que mencionaban el Santo Grial como un objeto sagrado y maravilloso, relacionado con la vida y la muerte de Jesucristo.

Sin embargo, el concepto del Santo Grial es mucho más antiguo y complejo, y se ha ido enriqueciendo y transformando con el paso del tiempo y con la influencia de diversas culturas y tradiciones. El Santo Grial no es solo un objeto material, sino también un símbolo espiritual, que representa la búsqueda de la verdad, la fe, la gracia y la salvación.

El Santo Grial se ha identificado con diferentes objetos a lo largo de la historia, como:

• La copa de la Última Cena: Esta es la interpretación más común y difundida del Santo Grial, que se basa en los relatos bíblicos de la Última Cena, el último encuentro de Jesucristo con sus discípulos antes de su pasión y muerte. Según los evangelios, Jesucristo tomó una copa, dio gracias, y la repartió entre sus discípulos, diciendo: “Tomad y bebed todos de ella, porque esta es mi sangre de la alianza, que se derrama por muchos para el perdón de los pecados” (Mateo 26:27-28). La copa de la Última Cena simboliza la presencia de Jesucristo en la Eucaristía, el sacramento que renueva su sacrificio y su alianza con los hombres.

Eucaristía de Juan de Juanes

• El plato de la Última Cena: Esta es otra interpretación del Santo Grial, que se basa en la tradición judía de la Pascua, la fiesta que conmemora la liberación del pueblo de Israel de la esclavitud de Egipto. Según el libro del Éxodo, Dios ordenó a los israelitas que celebraran la Pascua comiendo un cordero asado, pan sin levadura y hierbas amargas, y que pusieran la sangre del cordero en las puertas de sus casas, para que el ángel de la muerte pasara de largo y no los matara. La Pascua era la cena que Jesucristo celebró con sus discípulos antes de su pasión y muerte, y que dio origen a la Eucaristía. El plato de la Pascua contiene los elementos simbólicos de la cena, como el cordero, el pan, las hierbas, el vino y el hueso. El plato de la Última Cena simboliza la liberación de los hombres del pecado y de la muerte por la sangre de Jesucristo, el cordero de Dios.

El plato de José de Arimatea: Esta es otra interpretación del Santo Grial, que se basa en los relatos apócrifos de la pasión y muerte de Jesucristo, que no están incluidos en la Biblia, pero que han tenido una gran influencia en la tradición cristiana. Según estos relatos, José de Arimatea fue un discípulo secreto de Jesucristo, que pidió permiso a Pilato para bajar su cuerpo de la cruz y sepultarlo en un sepulcro nuevo. José de Arimatea llevó consigo un plato, que usó para recoger la sangre que manaba de las heridas de Jesucristo, y que guardó como una reliquia sagrada. El plato de José de Arimatea simboliza la compasión y la devoción por Jesucristo, y el poder milagroso de su sangre.

• La piedra filosofal: Esta es otra interpretación del Santo Grial, que se basa en la tradición alquímica, la ciencia y la filosofía que buscaba la transmutación de los metales y la obtención de la inmortalidad. Según los alquimistas, la piedra filosofal era una sustancia misteriosa y maravillosa, que podía convertir el plomo en oro, y curar todas las enfermedades y prolongar la vida. La piedra filosofal era el resultado de un proceso complejo y secreto, que implicaba la purificación y la unión de los elementos, y que se representaba con símbolos y metáforas. La piedra filosofal simboliza la búsqueda de la sabiduría, la perfección y la iluminación.

Cristo abrazado a la cruz de El Greco

Estas son solo algunas de las posibles identificaciones del Santo Grial, que muestran la riqueza y la diversidad de su significado.

Los destinos del Santo Grial

El Santo Grial es un objeto que ha viajado por el mundo, y que ha dejado su huella en diferentes lugares y culturas. Su destino ha sido incierto y controvertido, y ha dado lugar a numerosas leyendas y teorías. A continuación, vamos a repasar algunos de los posibles destinos del Santo Grial, y a ver qué evidencias y argumentos hay para sostenerlos.

• Jerusalén: Este es el lugar donde se originó el Santo Grial, según la interpretación más común, que lo identifica con la copa de la Última Cena. Según los evangelios, Jesucristo celebró la Última Cena con sus discípulos en una casa de Jerusalén, la noche antes de su pasión y muerte. 

Allí tomó una copa, la bendijo, y la compartió con sus discípulos, instituyendo la Eucaristía. La copa de la Última Cena se convirtió así en el Santo Grial, el recipiente sagrado que contenía la sangre de Jesucristo. Sin embargo, no se sabe qué pasó con la copa después de la cena, ni quién se la llevó o dónde la guardó. Algunos creen que la copa se quedó en Jerusalén, y que fue custodiada por los primeros cristianos, que se reunían en el Cenáculo, el lugar donde se celebró la Última Cena. Otros creen que la copa salió de Jerusalén, y que fue llevada por alguno de los discípulos o por algún personaje relacionado con la pasión y muerte de Jesucristo, como José de Arimatea o María Magdalena.

• Roma: Este es otro de los posibles destinos del Santo Grial, según la tradición católica, que lo vincula con la sede de la Iglesia y del papado. Según esta tradición, el Santo Grial fue llevado a Roma por el apóstol Pedro, el primer papa y el líder de los discípulos de Jesucristo. Pedro habría llevado consigo la copa de la Última Cena, y la habría usado para celebrar la Eucaristía con los primeros cristianos de Roma. El Santo Grial habría permanecido en Roma, y habría pasado de papa en papa, como un símbolo de la autoridad y la sucesión apostólica. Sin embargo, no hay ninguna prueba histórica ni arqueológica que confirme esta tradición, ni ningún documento papal que mencione el Santo Grial. Además, hay otras copas que se han reclamado como el Santo Grial, y que se encuentran en otros lugares de Italia, como la Sacra Catino de Génova, o el Caliz de San Lorenzo de Nápoles.

La Última Cena de Leonardo Da Vinci

• Glastonbury: Este es otro de los posibles destinos del Santo Grial, según la leyenda artúrica, que lo relaciona con el rey Arturo y sus caballeros. Según esta leyenda, el Santo Grial fue llevado a Glastonbury, una localidad del sur de Inglaterra, por José de Arimatea, el discípulo secreto de Jesucristo que lo sepultó en un sepulcro nuevo. 

José de Arimatea habría viajado a Glastonbury con un grupo de cristianos, y habría fundado la primera iglesia de Inglaterra. Allí habría escondido el Santo Grial, y habría plantado un espino sagrado, que florecía dos veces al año, y que era un signo de la presencia de Jesucristo. El Santo Grial habría permanecido en Glastonbury, hasta que fue descubierto por el rey Arturo y sus caballeros, que emprendieron la búsqueda del Santo Grial, como una prueba de su valor y de su fe. El Santo Grial habría sido hallado por el caballero Galaad, el más puro y virtuoso de todos, que pudo contemplar el milagro del Santo Grial, y que murió en paz. Sin embargo, no hay ninguna evidencia histórica ni arqueológica que apoye esta leyenda, ni ningún testimonio de José de Arimatea o de Arturo y sus caballeros. Además, hay otras localidades de Inglaterra que se han reclamado como el lugar donde se halla el Santo Grial, como la Abadía de Westminster o el Castillo de Corbenic.

• Valencia: Este es otro de los posibles destinos del Santo Grial, según la tradición española, que lo considera como una reliquia auténtica y venerable. Según esta tradición, el Santo Grial fue llevado a Valencia por el papa Calixto III, que era de origen valenciano, y que lo recibió como un regalo del rey de Aragón, Alfonso V el Magnánimo. Alfonso V habría obtenido el Santo Grial de su antepasado, el rey Martín el Humano, que lo heredó de su padre, el rey Pedro IV el Ceremonioso. 

El rey Arturo

Pedro IV habría recibido el Santo Grial de su abuelo, el rey Jaime II el Justo, que lo conquistó en la Batalla de las Navas de Tolosa, donde se enfrentó a los musulmanes. Jaime II habría encontrado el Santo Grial en el Castillo de Miravet, donde lo custodiaban los Caballeros Templarios, que lo habían traído de Tierra Santa, donde lo habían recuperado de los Sarracenos, que lo habían robado de Jerusalén, donde lo habían dejado los discípulos de Jesucristo. El Santo Grial habría permanecido en Valencia, y habría sido custodiado y venerado por los papas, los reyes y el pueblo. El Santo Grial se encuentra actualmente en la Catedral de Valencia, donde se puede visitar y admirar. Se trata de una copa de ágata, que data del siglo I a.C., y que tiene una base y unas asas de oro, que se añadieron posteriormente. Es la única copa que se ha sometido a estudios científicos, que han confirmado su antigüedad y su autenticidad.

Estos son solo algunos de los posibles destinos del Santo Grial, que muestran la variedad y la complejidad de su trayectoria. 

Las leyendas del Santo Grial

El Santo Grial es un objeto que ha generado numerosas leyendas, que han enriquecido y diversificado su significado. Estas leyendas han surgido de la imaginación y la creatividad de diferentes autores, que han plasmado sus visiones y sus interpretaciones del Santo Grial en obras de arte, literatura y cine. A continuación, vamos a repasar algunas de las leyendas más extendidas y famosas sobre el Santo Grial, y a ver qué elementos y qué mensajes contienen.

• La leyenda artúrica: Esta es la leyenda más conocida y difundida sobre el Santo Grial, que lo relaciona con el rey Arturo y sus caballeros de la Mesa Redonda. Esta leyenda se originó en el siglo XII, cuando aparecieron los primeros relatos literarios que mencionaban el Santo Grial como un objeto sagrado y maravilloso, que estaba oculto en algún lugar de Gran Bretaña. Estos relatos fueron escritos por autores como Chrétien de Troyes, Robert de Boron, Wolfram von Eschenbach o Thomas Malory, que se inspiraron en fuentes bíblicas, celtas, griegas y orientales. Estos relatos se fueron ampliando y modificando con el paso del tiempo y con la influencia de otras tradiciones, como la cristiana, la cátara o la templaria. 

Parsifal

La leyenda artúrica cuenta que el Santo Grial fue llevado a Gran Bretaña por José de Arimatea, el discípulo secreto de Jesucristo que lo sepultó en un sepulcro nuevo. José de Arimatea habría fundado la primera iglesia de Inglaterra en Glastonbury, y habría escondido el Santo Grial en algún lugar cercano, donde lo custodiaban unos guardianes misteriosos. El Santo Grial habría sido descubierto por el rey Arturo y sus caballeros, que emprendieron la búsqueda del Santo Grial, como una prueba de su valor y de su fe. El Santo Grial habría sido hallado por el caballero Galaad, el más puro y virtuoso de todos, que pudo contemplar el milagro del Santo Grial, y que murió en paz. La leyenda artúrica simboliza la búsqueda de la verdad, la fe, la gracia y la salvación, y también la decadencia y la caída del reino de Arturo, que se vio amenazado por la traición, el pecado y la guerra.

• La leyenda del Parzival: Esta es otra leyenda sobre el Santo Grial, que lo relaciona con el héroe Parzival, un joven caballero que se embarca en una aventura para encontrar el Santo Grial y convertirse en su rey. Esta leyenda se originó en el siglo XIII, cuando el poeta alemán Wolfram von Eschenbach escribió su obra “Parzival”, que se basó en el relato de Chrétien de Troyes, pero que introdujo cambios y novedades. Wolfram von Eschenbach cambió el nombre del héroe, que en el relato de Chrétien se llamaba Perceval, y le dio un origen y un destino más complejos y misteriosos. Wolfram von Eschenbach también cambió la naturaleza del Santo Grial, que en el relato de Chrétien era un plato o una copa, y lo convirtió en una piedra que tenía el poder de dar la vida y la felicidad. Wolfram von Eschenbach afirmó que su fuente era un libro escrito en una lengua desconocida, que le había sido revelado por un trovador llamado Kyot el Provenzal. 

Preste Juan

La leyenda del Parzival cuenta que el Santo Grial era una piedra que había caído del cielo, y que había sido custodiada por los ángeles. Los ángeles habían elegido a un linaje de reyes para que guardaran el Santo Grial, y les habían dado el nombre de Templarios. El Santo Grial estaba oculto en el Castillo del Grial, donde reinaba el rey Anfortas, que estaba herido y enfermo por culpa de un pecado. El Santo Grial solo podía ser visto y heredado por un caballero puro y digno, que fuera capaz de hacer la pregunta correcta al rey Anfortas. El caballero elegido era Parzival, que era el hijo del rey Gahmuret, que había muerto en una batalla, y de la reina Herzeloyde, que lo había criado en el bosque, alejado del mundo. Parzival se convirtió en caballero, y llegó al Castillo del Grial, donde vio el milagro del Santo Grial, pero no hizo la pregunta correcta al rey Anfortas, por lo que fue expulsado y condenado a vagar por el mundo, buscando el Santo Grial. Parzival tuvo que superar numerosas pruebas y tentaciones, y aprender el valor de la compasión y la humildad. Finalmente, Parzival volvió al Castillo del Grial, hizo la pregunta correcta al rey Anfortas, que se curó de su herida, y se convirtió en el rey del Santo Grial. La leyenda del Parzival simboliza la búsqueda de la sabiduría, la perfección y la iluminación, y también la iniciación y la transformación del héroe, que pasa de la ignorancia y el orgullo a la comprensión y la humildad.

• La leyenda del Preste Juan: Esta es otra leyenda sobre el Santo Grial, que lo relaciona con el Preste Juan, un mítico rey y sacerdote que gobernaba un reino fabuloso y cristiano en Oriente. Esta leyenda se originó en el siglo XII, cuando aparecieron las primeras cartas y relatos que mencionaban al Preste Juan, como un aliado potencial de los cristianos de Occidente, que se enfrentaban a los musulmanes en las Cruzadas. Estas cartas y relatos describían al Preste Juan como un monarca poderoso y piadoso, que poseía riquezas y maravillas, como el Santo Grial, el Arca de la Alianza, el Árbol de la Vida o el Paraíso Terrenal. Estas cartas y relatos se basaban en fuentes históricas, legendarias y fantásticas, como la Biblia, las Cruzadas, las misiones, los viajes o las fábulas. La leyenda del Preste Juan cuenta que el Santo Grial fue llevado a Oriente por los apóstoles Tomás y Felipe, que predicaron el evangelio en la India y en Etiopía. 

Los templarios y el grial

Allí fundaron una iglesia y una dinastía, que se mantuvo fiel a la fe cristiana, y que custodió el Santo Grial. El Santo Grial estaba oculto en una ciudad llamada Sambatión, que estaba rodeada por un río de arena, que solo se calmaba los sábados. El Santo Grial solo podía ser visto y heredado por un rey y sacerdote, que fuera descendiente de los apóstoles, y que tuviera el nombre de Juan. El rey y sacerdote elegido era el Preste Juan, que reinaba sobre un reino de paz y prosperidad, y que esperaba la llegada de los cristianos de Occidente, para ayudarles a liberar Tierra Santa. La leyenda del Preste Juan simboliza la búsqueda de la unidad, la fraternidad y la esperanza, y también la curiosidad y la admiración por el mundo desconocido y exótico.

La relación del Santo Grial con los Templarios

El Santo Grial tiene una estrecha relación con los Templarios, una de las órdenes militares y religiosas más poderosas y misteriosas de la historia. Los Templarios se fundaron en el siglo XII, con el propósito de proteger a los peregrinos y a los lugares santos en Tierra Santa, donde se libraban las Cruzadas. Los Templarios se convirtieron en una fuerza militar y económica, que contaba con el apoyo y la confianza de la Iglesia y de los reyes. Los Templarios también se dedicaron a la búsqueda y al estudio de los secretos y las reliquias de la fe cristiana, como el Santo Grial, el Arca de la Alianza, el Sudario de Turín o el Santo Sepulcro.

La relación del Santo Grial con los Templarios se basa en varias fuentes y teorías, que han alimentado la imaginación y la especulación de muchos. Algunas de estas fuentes y teorías son:

José de Arimatea

• La leyenda del Parzival: Esta es una de las primeras fuentes que relaciona el Santo Grial con los Templarios, y que se basa en la obra de Wolfram von Eschenbach, que mencionamos anteriormente. Según esta obra, el Santo Grial era una piedra que había caído del cielo, y que había sido custodiada por los ángeles. Los ángeles habían elegido a un linaje de reyes para que guardaran el Santo Grial, y les habían dado el nombre de Templarios. Los Templarios eran los guardianes y los reyes del Santo Grial, y vivían en el Castillo del Grial, donde reinaba el rey Anfortas, que estaba herido y enfermo por culpa de un pecado. El Santo Grial solo podía ser visto y heredado por un caballero puro y digno, que fuera capaz de hacer la pregunta correcta al rey Anfortas. El caballero elegido era Parzival, que se convirtió en el rey del Santo Grial. Esta obra sugiere que los Templarios tenían un conocimiento y una conexión especial con el Santo Grial, y que lo protegían y lo veneraban como un símbolo de su misión y de su fe.

• La leyenda del Priorato de Sión: Esta es una de las fuentes más polémicas y controvertidas que relaciona el Santo Grial con los Templarios, y que se basa en unos documentos falsos que aparecieron en el siglo XX, y que fueron desenmascarados como un fraude. Según estos documentos, el Santo Grial no era un objeto, sino una persona, o más bien, una descendencia. El Santo Grial sería el linaje de Jesucristo y de María Magdalena, que habrían tenido hijos, y que habrían fundado una dinastía secreta, que se habría perpetuado hasta nuestros días. Esta dinastía habría sido custodiada y protegida por una sociedad secreta llamada el Priorato de Sión, que habría sido fundada en el siglo XI, y que habría tenido como miembros a personajes ilustres, como Leonardo da Vinci, Isaac Newton o Víctor Hugo. El Priorato de Sión habría creado y controlado a los Templarios, que habrían sido su brazo armado y su fachada pública. Los Templarios habrían descubierto el secreto del Santo Grial en Tierra Santa, y lo habrían traído a Europa, donde lo habrían escondido en diferentes lugares, como Rennes-le-Château, un pueblo del sur de Francia, donde se habrían encontrado unos pergaminos codificados que revelaban el misterio del Santo Grial. Esta teoría ha sido desmentida y criticada por los historiadores y los expertos, que la consideran una invención y una manipulación, que no tiene ningún fundamento ni evidencia. Sin embargo, esta teoría ha tenido una gran repercusión y popularidad, gracias a obras de ficción como “El enigma sagrado” o “El código Da Vinci”, que la han difundido y explotado como una trama literaria y cinematográfica.

Grial de Valencia

• La leyenda del tesoro de los Templarios: Esta es otra de las fuentes que relaciona el Santo Grial con los Templarios, y que se basa en la historia real y dramática de los Templarios, que fueron perseguidos y exterminados por el rey de Francia, Felipe IV el Hermoso, y por el papa Clemente V, que los acusaron de herejía, blasfemia y sodomía. Los Templarios fueron arrestados, torturados y quemados en la hoguera, y su orden fue disuelta y confiscada. Sin embargo, se dice que los Templarios lograron salvar y ocultar parte de su tesoro, que era inmenso y valioso, y que incluía el Santo Grial, entre otras reliquias y secretos. Se dice que los Templarios escondieron su tesoro en diferentes lugares, como Escocia, Portugal, América o Rosslyn Chapel, donde se han buscado y se han encontrado indicios y pistas de su presencia y de su misterio. Esta teoría tiene algunos fundamentos y testimonios que la apoyan, pero también tiene muchas lagunas y contradicciones que la cuestionan. Además, esta teoría ha sido mezclada y confundida con otras leyendas y fantasías, que la han distorsionado y banalizado. 

El Santo Grial, pues, ha generado numerosas leyendas, que han enriquecido y diversificado su significado, pero también tiene un sentido profundo y trascendente, que expresa la esencia y el destino de la humanidad, que busca la verdad, la fe, la gracia y la salvación.